La fibromialgia es una enfermedad crónica caracterizada por dolor en los músculos, ligamentos y tendones, fatiga y múltiples puntos sensibles en el cuerpo de etiología desconocida. Mientras que la terapia disponible es a menudo decepcionante, la mayoría de los pacientes pueden ser ayudados con una combinación de medicación, el ejercicio y el mantenimiento de un horario regular de sueño.

La suplementación con Chlorella en pacientes con fibromialgia se ha evaluado en estudios clínicos. Por ejemplo, Merchant et al. (2000) evaluó los beneficios de la Chlorella pyrenoidosa en los participantes que sufren fibromialgia de moderada a severa, consumiendo 10 g ó 100 ml de Chlorella al día durante dos meses. Los resultados de este estudio sugieren que la suplementación dietética con Chlorella puede ayudar a aliviar los síntomas de la fibromialgia, ya que encontraron una disminución del dolor en un 22%.